SERIE: CUENTOS DE CUARENTENA Y ALGO MAS.
I
Un microscópico trol desciende por una escarpada pendiente árida llena de troncos quebrados en busca de algo que comer. Continua su andar hasta llegar a una cárcava, en lo que parece ser una comisura y un gran puente de nariz. Olfateo con placer hasta sentir un incontenible deseo de saborear y saciarse a boca llena. Se aferro a un gran tronco-vello, abrió sus fauces dejando al descubierto su potente dentadura y se avalanzo sobre aquella superficie en un descomunal mordisco..
II
-"Maldita sea, basta que salga a la calle y me ponga este tapaboca pa que me den ganas de rascarme la nariz", refunfuño malhumorado después de haber caminado tres cuadras procurando mantener distancias de todo aquel que parece acercarse a menos 25 metros de distancia.
UUUUUHHHHM-FFFFFssss vamos, control mental, control mental, aguanta!. Te la das de arrecho pa otras cosas y no eres capaz de soportar una picazón,...pero justo ahorita! y ahí, en el medio de la cara, ffffff que ladilla!"
III
Inmediatamente de aquel acto, el terreno empezó a contorsionarse en seguidas ondas que iban y venían hasta que cesaron. Casi al borde de un abismo, justo donde circulaba una profunda corriente de aire, el trol casi cae pero logra aferrarse con toda su fuerza clavando desesperadamente sus dedos sobre unos orificios similares a poros. Restablecido su equilibrio, sube nuevamente la pendiente hasta el gran arco-aleta-de-nariz y sin pensar en lo ocurrido, desafiante lanza otro soberano mordisco, quedando suspendido en peso por su formidable mandíbula a la espera de desprender el pedazo de aquella dura pero a la vez elástica corteza.
IV
"Nooooo otra vez noooooo!", rápidamente termino de cruzar la calle, movido mas por el desespero irritante de mi cara que por ser victima de un atropello. Camino a paso veloz, evitando evidenciar mi descomposición física y mental, mientras soy atacado por incontenibles ticks nerviosos sobre parpados y mejillas. "No te rasques, NO TE RASQUESSSSS!!!!aguanta, aguanta, respira, piensa en algo, tatatatatguaido-maduro-capriles-nohaygasolina-novolveran-trumputinfidel-jefedecalle-lentejas-covidmuerteMUERTE aynooo, por Dios, a la mierda todo!"
Al pasar detrás de un kiosco, lejos de la mirada de otros transeúntes me zampo una cachetada, otra mas y una tercera. Aturdido, tambaleando pero aun con el tapaboca en su sitio, salgo del espacio donde me ocultaba y retomo mi andar, hasta que sentí un nuevo ataque.
V
El trol babeaba por el efecto embriagante que le producia el sebo. De repente un haz de luz lo cegó cuando fue sorprendido por dos inmensas masas que se le acercaban. Intento escapar pero las dos masas lo aprisionaron como una gigantesca pinza. Sentía que era desmembrado por la presión ejercida. Aun con vida, la gran pinza se abrió, quedando adherida sus extremidades a una superficie y el resto al otro extremo. Agonizando y sin capacidad de mover mas que sus ojos, logro ver aquel bonito cielo azul de ese día. Un segundo mas tarde, sintió como se desplazaba a gran velocidad hacia lo que parecía una gran palma de mano. Desapareció en un instante en un medio giro de la superficie que lo soportaba, sobre aquella palma..
VI
"Me quite el tapabocas, que vaina!"
